IMAGINANDO
De repente, sin porque la mano se alejó del muslo.
Se elevó volteándose, palma hacia arriba. La mano.
Y el aire insoportable, hueco. Sujeción imposible.
El muslo, querencia adivinada en el envés.
Regresar ¿Invertir? Los dedos un gesto ¿gesto? un gemido, tal vez.
¿Cómo? Arriba, frío. Abajo, peor.
El cuello, sí, ahí... el cansancio...
La mano en el muslo, por fin, sin saber cómo...
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